Los tratamientos de fertilidad están en constante evolución. No nos damos cuenta pero realmente aún se conoce «muy poco» sobre la fertilidad humana. No está muy claro porque se produce la implantación embrionaria, tampoco los procesos que hacen que un óvulo sea de mala calidad o el esperma….
Lo que si se ha descubierto es que hay cada vez más factores que interfieren en la fertilidad humana. No es cosa únicamente del sistema reproductivo sino que intervienen múltiples factores como por ejemplo factores endocrinos, factores hematológicos, factores morfológicos o incluso factores inmunológicos.
Es en este punto de los factores inmunológicos en los que me voy a centrar hoy. Así que vayamos a ello.
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¿Para qué sirven los análisis KIR y HLA-C en tratamientos de fertilidad?
Los análisis KIR y HLA-C son de gran utilidad para vuestro equipo de fertilidad o vuestro ginecólogo (siempre que sepa interpretarlos) ya que ayudan a:
- Encontrar la causa de posibles abortos de repetición.
- Ayudan a prevenir posibles complicaciones durante el embarazo como por ejemplo la preeclampsia.
- También ayudan a determinar el número de embriones a transferir durante un tratamiento FIV
- Ayudan a determinar un donante compatible con la futura mamá, tanto en el caso de donación de esperma como en el caso de ovodonación.
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Y aquí va una ronda de aclaraciones….
¿Puedo tener incompatibilidad inmunológica con mi pareja o con un donante?
El sistema inmunológico nos protege de las agresiones externas y lucha contra los posibles invasores que potencialmente pueden dañar nuestra salud.
Al igual que ocurre con los transplantes de órganos, donde el cuerpo del receptor del transplante puede rechazar el órgano donado, el nuevo embrión puede ser reconocido por el sistema inmunitario de la madre como una amenaza y puede que no acepte acogerlo en su útero. Si esta situación ocurre, se podría hablar de incompatibilidad inmunológica de la pareja.
En un principio el útero materno, de por si, es de las pocas partes del cuerpo humano que está preparado para acoger un «ente exterior» ya que está preparado para crear un embrión que en parte está formado por material genético externo a su organismo.
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¿Qué puede ocurrir si existe una incompatibilidad genética entre mi pareja y yo?
Las incompatibilidades inmunológicas en el ámbito de la infertilidad pueden causar diferentes procesos entre los que destacamos los fallos de implantación, los abortos de repetición y la preeclampsia.
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Y en el caso de donación de óvulos o de esperma ¿Es importante este dato para la elección de un buen donante?
Por supuesto. Al realizar este estudio podemos elegir un donante inmunológicamente compatible, con lo que aumentaremos las posibilidades de lograr un embarazo
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¿Qué pruebas debería realizarme para detectar esta incompatibilidad?
Para detectar esta incompatilibidad los dos miembros de la pareja deberían realizarse un análisis de KIR y de HLA-C y sobretodo deberían encontrar el asesoramiento de un médico especialista en estos temas que sepa interpretar los resultados.
Actualmente algunas clínicas de reproducción asistida como IVI o Gravida en Barcelona tienen doctores especializados en temas inmunológicos o con grandes conocimientos sobre este tema.
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Para saber más sobre el tema…
El sistema inmunológico se compone de células y moléculas que interaccionan entre si para eliminar de nuestro organismo los agentes perjudiciales. Una de las células fundamentales del sistema inmunológico son los linfocitos Natural Killers o linfocitos NK. Estas células son muy importantes ya que luchan contra las infecciones por virus y eliminan las células tumorales que se generan en nuestro organismo.
Al mismo tiempo éstas células también juegan un papel importante en el acondicionamiento del endometrio para facilitar una posible implantación embrionaria.
Las células NK tienen en sus membranas unas proteínas llamas KIR y estas proteínas interaccionan con las moléculas HLA-C para hacer su función: o sea detectar infecciones por parte de algún virus, detectar células tumorales y discriminar lo que es del propio cuerpo con lo que viene de fuera (cuando se produce un transplante o un embarazo).
El HLA-C son un conjunto de moléculas que poseen nuestras células y son las encargadas de reconocer lo que es de nuestro cuerpo y lo que le es ajeno. Cuanto más diferente sea el HLA-C de los dos miembros de la pareja, mayor probabilidades habrá de que su sistema inmunológico detecte los respectivos materiales genéticos como ajenos.
Detectando mediante técnicas genéticas y de citometría de flujo, que tipo de KIR posee la futura mamá y las diferencias entre el HLA-C del futuro madre y del futuro padre se podrá determinar la existencia o grado de incompatibilidad entre la pareja.
