Candidas,  Salud

¿Una dieta demasiado alcalina puede empeorar tu Candidiasis?

En los últimos años las dietas alcalinas se han puesto de moda y muchos las siguen para mejorar su salud. Pero a menudo una dieta «demasiado» alcalina puede no ser del todo buena para las personas que luchamos contra la Candidiasis.

Y es que si bien hay partes del cuerpo que necesitan de un ph alcalino para poder funcionar mejor, el estómago y los intestinos necesitan de un ph un tanto ácido para poder matar a todas las bacterias malas o a las levaduras como por ejemplo las Cándidas.

Cándidas y pH

La Candida albicans es un microorganismo oportunista que puede sobrevivir en una amplia gama de niveles de pH, ya sea ácido o alcalino. De hecho, tiene dos formas diferentes que le permite hacer precisamente esto: una en forma de levadura y otra en forma de hongos (o «hifas»). Casi todos tenemos Cándidas en forma de levadura en nuestros intestinos y, en esta forma rara vez nos causa problemas, pero en forma de hongos las Cándidas se comportan de una forma más virulenta.

¿Cómo terminamos con una infección por Candidas? Pues de hecho tiene mucho que ver con el Ph de nuestros intestinos. Las Cándidas, cuando están en forma de levadura es porque nuestros intestinos tienen un ambiente ácido, pero cuando este entorno, por el motivo que sea, se vuelve más alcalino, puede cambiar a forma fúngica y provocar una infección. Hacer que nuestros intestinos sean más alcalinos puede tener como consecuencia una super estimulación del hongo Cándida, lo que puede desencadenar en una infección.

Tomemos el ejemplo de una persona sana que lleva una dieta equilibrada y no ha tomado antibióticos recientemente. Los intestinos de esta persona serán en general ligeramente ácidos, lo que significa que la mayoría de Cándidas de sus intestinos estarán en forma de una levadura, en este estadio las Cándidas son relativamente inofensivas. Sin embargo, cuando toma antibióticos, esto cambia por completo. El antibiótico cambia el entorno de nuestros intestinos y elimina las «bacterias buenas» que viven en él. Muchas de estas bacterias producen ácido como subproducto metabólico y tienen nombres como acidophilus («amantes de los ácidos» en latín). Sin estas bacterias, el pH de nuestros intestinos aumenta rápidamente y se vuelve neutral o incluso alcalino. Es en este momento cuando las levaduras se transforman en su forma fúngica y se convierten en una infección.

¿Cómo puede cambiar nuestro pH intestinal?

Debemos partir de la base de que nuestro pH intestinal debe de ser ácido en su estado normal. Pero claro existen una serie de factores que pueden alterarlo como por ejemplo: un desequilibrio hormonal, una mala salud intestinal de las «bacterias buenas» que viven en nuestro organismo o por ejemplo nuestra alimentación. Cuando tomamos demasiados alimentos alcalinos puede que nuestro pH intestinal aumente y se desencadene una Candidiasis.

Por ejemplo, las frutas, que contienen muchos azúcares, son un alimento altamente alcalanizante. Es por eso que cuando seguimos una dieta anticándidas no debemos tomar frutas (a excepción quizás de alguna manzana de vez en cuando).

Además, las Cándidas, que se trata de unos hongos muy oportunistas, siempre tratan de hacer que su entorno sea lo más alcalino posible. De hecho, uno de los principales subproductos del metabolismo de las Cándidas es el amoníaco, un gas altamente alcalino. Cuando las Cándidas liberan amoníaco en los intestinos, éstos aumentan gradualmente su pH. Pero por lo general, esto se contrarresta por las bacterias productoras de ácido en nuestros intestino. Pero claro, si por alguna razón estas bacterias desaparecen o minvan su población, el equilibrio se pierde y el pH aumenta.

Las células de las levaduras Cándidas solo pueden convertirse a su forma fúngica (y comenzar a causar síntomas de Candidiasis) cuando el pH de nuestros intestinos se vuelve neutral o ligeramente alcalino. Mantener la acidez natural en nuestros intestinos es la base de que esto no suceda. Y los suplementos alcalinos que usan muchas personas que hacen dieta (bicarbonato de sodio, por ejemplo) pueden transformar rápidamente el pH de nuestros intestinos y hacerlo demasiado alcalino.

Así que para no tener Candidisis la primera norma seria:

«Mantener el pH de nuestros intestinos ácido»

¿Cómo restaurar el pH correcto de nuestros intestinos?

Pues puedes seguir algunas pautas concretas, y muy básicas, que permitirán mantener ácido el pH de los intestinos y de esta manera evitar una Candidiasis.

Regula tu dieta


Minimizar el consumo de fruta no solo evitará que toda esa fructosa alimente a las Cándidas. Sinó que también detendrá el efecto alcalinizante que la fruta tiene en nuestros intestinos.

Toma alimentos probióticos

Las bacterias probióticas que podemos encontrar en suplementos alimenticios pero también en ciertos alimentos segregan cantidades de ácido láctico y ácido acético en los intestinos. Este ácido es una gran defensa contra los patógenos y evita que las Cándidas se reproduzcan en grandes cantidades y se conviertan en una infección. Algunos de estos alimentos son:

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Tomar alimentos antifúngicos

Puede que no lo sepas, pero la mayoría de alimentos antifúngicos en realidad son ácidos. Por ejemplo, el aceite de coco contiene tres antifúngicos probados: el ácido caprílico, el ácido láurico y el ácido cáprico.

Así que combinar estos tres elementos es la mejor manera de mantener el nivel correcto de acidez en nuestros intestinos y prevenir una Candidiasis.

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