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¿Cómo un intestino desequilibrado puede dañar tu piel?

La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo. Según diversos cálculos, de promedio, cada ser humano está formado por más de 300 millones de células de piel. Y todos queremos que nuestra piel luzca sana y reluciente.

Nuestra piel realiza mil y una funciones en nuestro cuerpo. Es el órgano encargado de regular nuestra temperatura corporal, es la primera línea de defensa contra los organismos infecciosos y además es la barrera protectora que mantiene los órganos internos, los huesos y los músculos a salvo de daños y enfermedades.

Los cambios en nuestra piel pueden ser indicativos de cambios en nuestra salud en general. El acné, la psoriasis y otros problemas de la piel pueden ser un signo de un problema en otra parte del cuerpo.

Quizás haya oído hablar de alimentos que provocan brotes de acné o que provocan eczema. Investigaciones recientes han encontrado un vínculo definitivo entre el intestino y la piel. Este vínculo entre estos órganos se denomina eje intestino-piel. (1)

¿Eres de los que te gusta comer comida rápida y beber habitualmente refrescos demasiado edulcorados? Seguramente tu piel tiende a verse manchada, seca y poco saludable.

El microbioma de la piel

Nuestra piel es el hogar de más 1000 especies de bacterias. La mayoría son bacterias beneficiosas y no causan efectos adversos para nuestra salud.

Estas bacterias ayudan a mantener la salud de nuestra piel de la misma manera que las bacterias que evitan en nuestro intestino intervienen en nuestra salud digestiva.

El microbioma tanto de nuestro intestino como de nuestra piel debe contener tantas variedades de cepas bacterianas saludables como sea posible. Las bacterias juegan un papel fundamental en la conservación, hidratación y elasticidad de nuestra piel. Una buena microbioma en la piel reduce es la responsable de la reducción del acné, las manchas y las espinillas.

Las bacterias buenas de habitan en nuestra piel producen sustancias que evitan que las bacterias dañinas se multipliquen y surjan desequilibrios, lo que ocasiona enfermedades en nuestra piel como por ejemplo el acné.

Un intestino sano es sinónimo de una piel sana


La salud de nuestro intestino es vital para nuestra piel. El tracto gastrointestinal es un sistema extremadamente complejo que comienza en la boca y continúa por el estómago, los intestinos delgado y grueso y termina en el recto y el ano.

Nuestro tracto gastrointestinal es responsable de absorber los nutrientes de los alimentos, eliminar las toxinas y los productos de desecho del cuerpo, controlar la inflamación y evitar que las infecciones dañen nuestro organismo (¡Nuestro intestino alberga más del 70% de nuestras células inmunitarias!) (2)

Tu intestino es un sistema muy complejo y la forma en que reacciona a tu dieta tendrá un impacto en todo tu cuerpo. Una dieta sana y equilibrada rica en fibra apoyará la salud intestinal y permitirá que se reproduzcan las bacterias beneficiosas del microbioma.

Lo contrario ocurre con una dieta poco saludable con altos porcentajes de azúcar refinado y carbohidratos, comida rápida y/o carne procesada. Estos alimentos pueden dar lugar a un crecimiento excesivo de microorganismos dañinos en el sistema digestivo, provocando disbiosis que a su vez puede dar lugar a complicaciones de salud.

El eje intestino-piel


Tu piel y tu intestino funcionan en armonía. El sistema digestivo elimina las toxinas de tu cuerpo, ya sea de tu dieta o de los procesos corporales, y estas toxinas se excretan, en parte, a través de la piel. Cuanto mayor sea el volumen de toxinas en tu cuerpo, mayor será la cantidad excretada a través de la piel que, a su vez, puede causar problemas en la piel. Los signos de un intestino enfermo a menudo se mostrarán en la piel antes de mostrar signos en otros lugares.

Las afecciones cutáneas crónicas, como la psoriasis, suelen tener una causa subyacente en los intestinos.

Por ejemplo, una investigación ha demostrado que las personas con psoriasis tienen menos diversidad en el microbioma intestinal que las personas que no padecen psoriasis. (3)

Otro ejemplo es la rosácea, que se ha relacionado con el crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado (o SIBO).

Los desequilibrios como el crecimiento excesivo de Candida y SIBO pueden provocar daños en el revestimiento de los intestinos, lo que provoca una afección adicional llamada intestino permeable. Cuando la membrana intestinal se vuelve permeable, puede provocar inflamación crónica y una variedad de síntomas. Estos pueden contribuir a afecciones de la piel como acné hormonal, eczema, rosácea y/o psoriasis.

Alimentos que se deben evitar para tener una piel sana


Si quieres tener una piel más sana debes mantener una dieta saludable y es muy posible que logres controlar problemas comunes de la piel, como el acné y el eccema.

PARA EL ACNÉ


Lo más importante es evitar o reducir la ingesta de carbohidratos refinados. Estos incluyen azúcar blanca y granos a los que se les han quitado todos sus nutrientes. Algunos ejemplos son harina blanca, arroz blanco, cereales para el desayuno, pasta, masa para pizza y pan.

Alimentos como estos se digieren rápidamente y provocan un aumento en el azúcar en sangre. Rápidamente sigue un aumento de insulina para hacer frente al aumento de azúcar en la sangre, y es este pico de insulina el que se ha demostrado que estimula las glándulas sebáceas de la piel para producir grasa, lo que aumenta la probabilidad de desarrollar acné.

PARA LA PSORIASIS


La psoriasis es una enfermedad autoinmune crónica en la que tu sistema inmunológico ataca las células sanas de tu cuerpo en lugar de atacar a los microorganismos infecciosos.

El ciclo de vida de las células de la piel es más rápido de lo normal con la psoriasis, lo que lleva a una acumulación de células en la superficie de la piel, formando escamas y parches de piel roja e irritada que pican y duelen.

Mantener un microbioma intestinal diverso es vital; los que padecen psoriasis tienen una gama mucho menor de bacterias en su microbioma intestinal. El microbioma es esencial para la salud, y no debería sorprendernos que, si está desequilibrado, surjan problemas como la psoriasis.

Los alimentos inflamatorios que se deben evitar incluyen carnes rojas, alimentos fritos, pasta, pasteles y pan y azúcares.

Qué comer para una piel sana


Para evitar problemas de la piel, consume una dieta baja en azúcar y alimentos inflamatorios y alta en antioxidantes

Los problemas con la piel se pueden atribuir a la disbiosis del microbioma intestinal, por lo que debes incluir probióticos de buena calidad para apoyar la salud tanto del intestino como de la piel. Estos son algunos de los alimentos que debe incluir en su dieta si desea una piel que brille con salud:

OMEGA 3:

El pescado, especialmente el pescado graso o azul, es un componente importante de una dieta saludable. El salmón y el arenque silvestres son algunas variedades de pescado azul que también son bajos en metales pesados ​​y otras toxinas.

Estos pescados tienen un alto contenido de ácidos grasos omega-3 que ayudan a mantener la piel hidratada y flexible. Las deficiencias en este ácido graso a menudo se pueden notar en primera instancia debido a la piel seca y escamosa.

Los ácidos grasos omega-3 reducen la inflamación en el cuerpo y ayudan con los trastornos autoinmunes como la psoriasis y el lupus.

El pescado graso también le proporciona zinc, un mineral esencial para producir nuevas células cutáneas. Una deficiencia de zinc puede provocar inflamación y lesiones en la piel. También encontrará una gran cantidad de vitamina E antioxidante en los pescados grasos, que protege contra la inflamación y el daño oxidativo causado por los radicales libres. No olvides que el pescado, en general, es una excelente fuente de proteína que tu piel necesita para su salud.

FRUTAS Y VERDURAS BAJAS EN AZÚCAR


Una dieta rica en productos saludables es la piedra angular de la salud. Siempre que sea posible, elije productos orgánicos que no estén contaminados por productos químicos nocivos y que te proporcionen las cantidades óptimas de nutrientes. Toda la nutrición basada en plantas es buena para la piel y la salud intestinal, pero aquí hay algunas superestrellas que debes incluir en tu dieta:

Aguacates


Estas superfrutas contienen vitamina E y C y grasas saludables. En un estudio extenso de más de 700 mujeres, se encontró que aquellas que consumían una dieta alta en los tipos de grasas saludables que podemos encontrar en el aguacate tenían una piel más flexible y saludable que aquellas que no consumían estas grasas.

Al igual que con los pescados grasos, los aguacates tienen un alto contenido de vitamina E antioxidante. Esto es más eficaz cuando se consume en combinación con la vitamina C, que también es necesaria para crear la proteína estructural colágeno.

Brócoli


Esta verdura verde está repleta de zinc, vitaminas A y C y luteína. La luteína es un carotenoide que protege la piel de ese daño oxidativo que provoca arrugas y sequedad.

El brócoli también es una fuente del compuesto sulforafano que se ha descubierto que protege contra los daños que puede causar el sol.

NUECES Y SEMILLAS


Los frutos secos y las semillas contienen muchos nutrientes que apoyan la piel. Las nueces contienen ácidos grasos esenciales y son una fuente más concentrada de ácidos grasos omega-3 que otros frutos secos. Contienen zinc, las vitaminas antioxidantes E y C y selenio que ayudan a combatir la inflamación y la infección.

Las semillas de girasol son una rica fuente de vitamina E, selenio y proteínas, las cuales ayudarán a tu piel a sanar, a defenderse de las infecciones y a brillar con salud.

PROBIÓTICOS


Una forma conveniente de ayudar a su microbioma intestinal y cutáneo es tomando un suplemento probiótico diario que contiene bacterias beneficiosas.

Si tu microbioma intestinal está desequilibrado debido a un crecimiento excesivo de Candida, una dieta deficiente o un tratamiento con antibióticos, los probióticos ayudarán a su microbioma a recuperar un equilibrio saludable.

Ten en cuenta que no todos los probióticos son iguales y es esencial seleccionar un producto de alta calidad que pueda hacer el trabajo que dice.

Eres lo que comes

Para una salud óptima, tu intestino requiere una dieta saludable que le proporcione a tu cuerpo las vitaminas, minerales y nutrientes correctos. Tu microbioma intestinal también se beneficiará de los probióticos y esto, a su vez, beneficiará a tu piel.

Y nunca me cansaré de repetirlo: eres lo que comes. Tu piel es en muchos sentidos es el espejo de tu intestino. Si tu sistema digestivo y tu microbioma están sanos, entonces tu piel lo reflejará con una dermis suave, libre de infecciones y un brillo radiante.

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